Washington, 7 nov (Prensa Latina) El consumo de marihuana (cannabis) en cualquier momento, ya sea recreativo o medicinal, puede desarrollar enfermedades cardiovasculares, pulmonares y de los vasos sanguíneos aseguran hoy investigadores de la Asociación Estadounidense del Corazón.
Adultos mayores que no fuman tabaco, pero sí consumen marihuana tienen un mayor riesgo de sufrir un ataque cardíaco y un derrame cerebral cuando están hospitalizados, mientras que las personas que la usan a diario tienen un 34 por ciento más de probabilidades de desarrollar insuficiencia cardíaca, afirman los expertos.
Las recomendaciones de la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés) insisten en abstenerse de fumar o vapear cualquier sustancia, incluidos los productos de cannabis, por aumentar las concentraciones sanguíneas de carboxihemoglobina (monóxido de carbono, un gas venenoso).
También incrementan los contenidos de alquitrán (materia combustible parcialmente quemada), similar a los efectos de la inhalación de un cigarrillo de tabaco, los cuales se han relacionado a enfermedades del músculo cardíaco, dolor en el pecho, alteraciones del ritmo cardíaco, ataques cardíacos y otras afecciones graves.
La AHA aseguró que el consumo de marihuana está aumentando entre los adultos mayores, de acuerdo con un estudio de 2023 que encontró que el consumo excesivo de alcohol y marihuana entre los mayores de 65 años subió en un 450 por ciento entre 2015 y 2019.
Ese grupo poblacional suele desarrollar una serie de enfermedades crónicas que empeoran el impacto de la marihuana, según uno de los estudios que examinó los registros hospitalarios de esas personas con trastorno por consumo de cannabis que no fumaban tabaco.
Otra investigación ratificó la presencia diaria de ese producto puede incrementar en un tercio el riesgo de enfermedad de las arterias coronarias de un individuo en comparación con aquellos que nunca la usan.
La enfermedad de las arterias coronarias es causada por la acumulación de placa en las paredes de las arterias que suministran sangre al corazón. También llamada aterosclerosis, es el tipo más común de padecimiento cardíaco, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.